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Packaging & Branding para marcas líderes
9 diciembre, 2025 / Institucional -
La pandemia dejó un legado inesperado: una generación hambrienta de nostalgia que nunca vivió. Mientras los confinamientos difuminaban los límites temporales, la Generación Z descubrió algo profundo en décadas pasadas. Este giro cultural está transformando el diseño de packaging, creando un lenguaje visual que habla a los nativos digitales a través de memorias heredadas en lugar de vividas.
Qué vas a aprender sobre diseño neo-vintage en packaging:
– La anemoia impulsa decisiones de compra en la Gen Z.
– Neo-vintage es remix cultural, no copia literal del pasado.
– Marcas con legado tienen ventaja auténtica sobre startups emergentes.
– El packaging nostálgico construye puentes emocionales entre generaciones.
– Casos exitosos de marcas que se rediseñaron con estilo retro.
La anemoia —esa añoranza agridulce por una época que nunca conociste— se convirtió en la experiencia emocional definitoria de la Gen Z. Sienten melancolía al ver fotografías de los 80 o series de los 90, a pesar de no tener ninguna conexión personal con esas épocas. Esto impulsa el consumo sin precedentes de moda retro, videojuegos vintage y experiencias gastronómicas nostálgicas.
“La anemoia representa fascinación y anhelo por el pasado de otra persona, como si estuvieras recordando vidas que no te pertenecen. Esta emoción se alimenta de la insatisfacción presente y necesidades profundas de conexión.”
Hernán Braberman, Director Creativo, Tridimage
Para los nativos digitales acostumbrados a experiencias mediadas por pantallas, los objetos tangibles llevan una novedad inesperada. El resurgimiento de las cámaras Polaroid lo ejemplifica perfectamente: la calidad inferior de la imagen se vuelve irrelevante cuando la fotografía instantánea proporciona un respiro de la sobresaturación digital.

El diseño neo-vintage de packaging funciona como un remix cultural sofisticado en lugar de una reproducción literal del pasado. Estos diseños extraen gestos, atmósferas y señales visuales de décadas pasadas, mezclándolos con elementos contemporáneos. El resultado crea un puente temporal que les recuerda a los jóvenes lo buenas que eran las cosas antes mientras los guía hacia lo buenas que podrían ser.
Cuando Burger King abandonó el futurismo elegante por cálidas estéticas retro, reconocieron una verdad fundamental: los futuros inciertos hacen que los pasados reconfortantes sean más atractivos que nunca.

En nuestro mundo hiperacelerado, la nostalgia sirve como ancla al momento presente. La filosofía de diseño “Viejo/Nuevo”, inspirada en estéticas de los 60 y 70, proporciona estabilidad emocional cuando el tiempo se siente poco confiable. Los centennials idealizan el pasado como más auténtico, más lento y fundamentalmente más humano que su realidad actual.
La Gen Z a menudo prefiere una postal desteñida del ayer antes que una fotografía nítida del hoy.

Las marcas con mucha historia poseen ventajas únicas para adoptar el diseño neo-vintage: herencia auténtica. A diferencia de las marcas emergentes que toman prestado de la memoria colectiva, las marcas con legado pueden explotar sus propios archivos en busca de artefactos genuinos, creando packaging que se siente tanto nostálgico como legítimo.
Esta autenticidad natural permite que las marcas heredadas reinterpreten su propia historia visual sin parecer oportunistas. El atractivo multigeneracional se vuelve poderoso: los consumidores mayores experimentan un reconocimiento genuino mientras las audiencias más jóvenes perciben los mismos elementos como “retro-cool”. Una sola decisión de diseño tiende puentes generacionales.

En un marketplace saturado de innovación de startups, las marcas con legado pueden diferenciarse combinando su trayectoria establecida con sensibilidades contemporáneas. Para los centennials que viven tiempos de incertidumbre sin precedentes, las marcas heredadas que ofrecen estéticas neo-vintage entregan algo invaluable: estabilidad envuelta en lenguaje visual familiar.
El packaging neo-vintage proporciona pertenencia a algo más grande que la experiencia inmediata, algo que los entornos digitales a menudo no pueden ofrecer. Para diseñadores y marcas, entender la anemoia significa reconocer que el diseño neo-vintage efectivo no reproduce el pasado, sino que lo reimagina como una base para construir futuros que valgan la pena.
“El diseño neo-vintage efectivo no se trata de reproducir el pasado. Se trata de reimaginarlo como fundamento para futuros dignos de construir.”
Hernán Braberman, Director Creativo, Tridimage
En un mundo donde la tecnología avanza a velocidades vertiginosas, el packaging se convierte en punto de contacto tangible con valores atemporales. El branding tridimensional permite que las marcas construyan identidades que trasciendan la góndola y se establezcan en la memoria emocional del consumidor.
FAQ: Packaging Neo-vintage
¿Qué es la anemoia y por qué importa para el diseño de packaging?
La anemoia es la nostalgia por una época que nunca viviste. Para las marcas de consumo masivo, entender este fenómeno es clave para conectar con centennials que buscan autenticidad y refugio emocional en productos tangibles dentro de un mundo digitalmente saturado.
¿El neo-vintage es solo una tendencia pasajera o tiene fundamentos más profundos?
No es una moda superficial sino una respuesta cultural a tiempos acelerados. Las marcas que lo aplican con autenticidad están construyendo conexiones que trascienden lo visual y tocan fibras emocionales duraderas.
¿Cómo pueden las marcas sin historia adoptar el neo-vintage?
Las marcas nuevas pueden trabajar con referencias culturales amplias y crear su propia narrativa de “legado futuro”. Sin embargo, deben evitar la apropiación superficial y enfocarse en construir autenticidad desde otro ángulo: innovación disruptiva, transparencia radical o propósito genuino. La clave está en encontrar una voz propia auténtica.
¿Qué riesgos existen al implementar diseño neo-vintage?
El principal riesgo es caer en la copia literal sin entender el contexto emocional. El neo-vintage mal ejecutado puede verse genérico o incluso anticuado. También existe el peligro de alienar al público actual si el cambio es demasiado radical. La estrategia debe balancear nostalgia con modernidad, y siempre partir de un diagnóstico marcario profundo.
¿Cómo medimos el éxito de un rediseño neo-vintage?
Más allá de las métricas tradicionales de ventas, el éxito se mide en la capacidad de la marca para construir puentes generacionales. ¿Retiene a su público leal mientras atrae nuevos consumidores? ¿Genera conversación y reconocimiento? ¿Se reconoce genuinamente en la góndola?
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Este artículo es una transcripción y adaptación de la nota “Neo Vintage Design: How Generation Z is Rewriting the Rules of Nostalgic Packaging” de Hernán Braberman para la plataforma de contenido Plastics Engineering.
Hernán Braberman es Socio y Director Creativo de Tridimage, una reconocida agencia de diseño de packaging con sede en Buenos Aires, Argentina. Su experiencia en branding y diseño estructural ha contribuido a crear y revitalizar marcas de consumo líderes en América Latina y el mundo.
Como conferencista internacional, viaja por el mundo impartiendo charlas, workshops y capacitaciones que inspiran a la industria. Su autoridad en diseño de packaging lo ha llevado a ser jurado en las competencias más prestigiosas del sector y colaborador en publicaciones especializadas a nivel global.
Además, es el creador y anfitrión de Branderman, un podcast en el que conversa con referentes de la industria sobre cómo el packaging puede transformar la relación entre las marcas, los consumidores y el planeta.Bajo su dirección creativa, Tridimage ha obtenido los máximos reconocimientos del sector, entre ellos Pentawards, A’Design, Ameristar, Estrella del Sur y Vertex Awards, consolidando su compromiso con la excelencia en el diseño sin fronteras.